En vísperas de la Navidad, siete integrantes de la Fuerza Pública de Colombia, secuestrados por las disidencias de las Farc al mando de alias Iván Mordisco, enviaron pruebas de supervivencia a través de videos y mensajes de voz que fueron difundidos en redes sociales. Las grabaciones, publicadas por el medio regional Primera Edición, dejaron en evidencia no solo el estado físico de los uniformados, sino también la profunda carga emocional de sus palabras, dirigidas a sus familias y al Estado colombiano tras varios meses de cautiverio.
Uno de los mensajes más conmovedores fue el del soldado profesional Jeison Javier García Rodríguez, quien aprovechó la cercanía de la Navidad para enviar un saludo a sus seres queridos y, al mismo tiempo, formular un llamado urgente al Gobierno nacional. “Mi nombre es Jeison Javier García Rodríguez. Quiero darle una feliz Navidad a mi familia. Quiero decirle al Estado que por favor se acuerde de nosotros, ya que nos ha prometido tantas cosas y no nos ha cumplido”, expresó el uniformado, secuestrado desde hace cuatro meses.
Las imágenes muestran a soldados del Ejército Nacional y miembros de la Policía Nacional retenidos en zonas rurales de los departamentos de Cauca y Nariño, regiones donde la presencia de grupos armados ilegales continúa siendo fuerte. Desde su lugar de reclusión, los cautivos enviaron palabras de aliento y cariño a sus familias, con la intención de tranquilizarlas y confirmar que siguen con vida.
García Rodríguez, visiblemente afectado, dedicó parte de su mensaje a sus familiares más cercanos. “Quiero decirle a mi mamá que la amo mucho, a mi hija también que la amo de todo corazón, a mi esposa quiero mandarle un saludito, a mi abuela, a mis dos hermanos y a toda mi familia”, señaló el soldado, en un mensaje cargado de nostalgia y esperanza.
Otro de los uniformados que apareció en los videos fue Jamerson Adrián Guachetá Guachetá, quien manifestó su preocupación por el bienestar de sus padres y hermanas. “El día de hoy le quiero enviar un saludo a mi familia, que les deseo una feliz Navidad. Un saludo para mi mamá, mi papá y para mis hermanas y a toda mi familia. Decirles que estoy bien, con vida y salud. Acá el trato ha sido muy bueno”, afirmó.
El soldado profesional Brayan Stiven Ruiz Toro también envió un mensaje emotivo, luego de recibir grabaciones de sus familiares, las cuales, según explicó, le han servido de fortaleza emocional durante el encierro. “A mi familia quiero desearles unas felices Navidad, que los amo mucho, que los quiero, que los aprecio. El video que ustedes me enviaron lo recibí y la verdad me reconforta el corazón, me da felicidad y me da fuerza para continuar”, expresó.
Entre los secuestrados se encuentra además Carlos Ricardo Martínez, patrullero adscrito a la Dirección Nacional de Protección de la Policía Nacional. En su intervención, fechada el 24 de diciembre de 2025, envió un mensaje de calma a sus allegados. “Me permito enviarle un saludo a mi familia, decirles a todos que yo estoy muy bien. Se sabe que es una situación dura, pero en el tiempo que he estado me han tratado muy bien. Hago el llamado a que estén calmados, no se desesperen, todo se va a dar con el favor de Dios, sigamos orando”, manifestó.
A su turno, el auxiliar de Policía José Larrahondo agradeció el respaldo constante de sus familiares y les envió un mensaje de afecto. “Quiero decirle a mi familia que yo también los quiero mucho. También quiero desearles una feliz Navidad, que los amo mucho y que los llevo aquí en el corazón”, indicó.
Más allá de los mensajes familiares, los uniformados aprovecharon los videos para expresar reclamos directos al presidente Gustavo Petro y al ministro de Defensa, Pedro Sánchez, por lo que consideran una falta de acciones concretas para lograr su liberación. García Rodríguez fue enfático al señalar que, tras cuatro meses de secuestro, no ha visto resultados. “Llevamos cuatro meses de estar acá y no se ha pronunciado por ningún lado”, sostuvo.
Guachetá Guachetá, quien completa cinco meses en cautiverio, expresó un sentimiento de abandono. “No se ha visto ningún interés por ayudarnos a mí y a mis compañeros. Le quiero decir que al menos se pongan la mano en el corazón y piensen también en sus soldados, porque nosotros hacemos una labor por Colombia. Nos hemos sentido solos. Solo nuestra familia nos ha estado enviando mensajes”, afirmó.
Sobre las condiciones del cautiverio, los secuestrados coincidieron en que, según sus relatos, se les ha respetado el derecho internacional humanitario. Guachetá Guachetá aseguró que reciben alimentación tres veces al día, mientras que García Rodríguez señaló que el trato ha sido “muy bueno” en términos generales. No obstante, Ruiz Toro introdujo algunos matices al indicar que, aunque se han respetado sus derechos básicos y la alimentación, la situación sigue siendo compleja por la prolongación del encierro.
Los uniformados también entregaron detalles sobre las circunstancias de sus capturas. García Rodríguez fue secuestrado durante combates en el departamento de Nariño. Guachetá Guachetá relató que fue privado de la libertad el 24 de julio en zona rural del municipio de Cajibío, Cauca, mientras se desplazaba en un vehículo de servicio público. Martínez indicó que fue retenido el 31 de octubre en la vía nacional que comunica a La Plata con Popayán. Los demás secuestrados mencionaron hechos relacionados con enfrentamientos armados en el suroccidente del país.
En todos los casos, los siete miembros de la Fuerza Pública llevan entre dos y cinco meses en poder del Estado Mayor Central de las disidencias de las Farc, en territorios donde persisten la confrontación armada y la inseguridad. Mientras tanto, las operaciones militares y policiales continúan en Cauca y Nariño con el objetivo de presionar a los grupos ilegales y lograr la liberación de los cautivos, en medio del rechazo público del Gobierno frente a estos secuestros.
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