El Ministerio de Salud y Protección Social de Colombia confirmó este martes 23 de diciembre la detección del primer caso en el país del virus influenza A(H3N2), correspondiente al denominado subclado K. La identificación se realizó en un paciente con síntomas respiratorios leves que había realizado un viaje reciente a Estados Unidos, específicamente en un crucero con salida desde la ciudad de Miami.
De acuerdo con la información oficial, el caso fue detectado gracias a estudios moleculares adelantados por el Instituto Nacional de Salud (INS), en articulación con el Grupo de Genómica de Antioquia y otras dependencias especializadas en virología y salud pública. El paciente presentó fiebre, rinorrea y tos, signos compatibles con una infección respiratoria aguda, sin que se hayan reportado complicaciones adicionales ni necesidad de hospitalización.
La confirmación del subclado K, identificado técnicamente como J.2.4.1, se realizó mediante la prueba molecular FilmArray respiratorio, una de las herramientas diagnósticas empleadas para la vigilancia de virus respiratorios en el país. Hasta el momento, las autoridades sanitarias han enfatizado que no existe evidencia de un aumento en la incidencia de casos graves, hospitalizaciones o muertes asociadas a esta variante.
Características del subclado K y panorama internacional
El virus influenza A(H3N2) subclado K se encuentra bajo seguimiento permanente de organismos internacionales como la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (Ecdc). Esta variante presenta mutaciones en la proteína de la hemaglutinina, estructura clave que permite al virus ingresar a las células humanas y que, además, constituye uno de los principales objetivos de las vacunas contra la influenza.
Según los reportes internacionales, dichas mutaciones han coincidido con un incremento de casos de influenza en el hemisferio norte, particularmente en Europa y Estados Unidos. Sin embargo, tanto la OPS como el Ecdc han señalado que no existen indicios de que el subclado K genere cuadros clínicos más severos ni un aumento en la mortalidad frente a otras variantes del virus.
En diálogo con el diario El Espectador, el infectólogo y magíster en Epidemiología Clínica Carlos Arturo Álvarez Moreno explicó que este tipo de cambios genéticos son esperables. “Los virus mutan para subsistir, y eso ocurre con la gripe todos los años. No se trata de un fenómeno distinto al que suele observarse durante las temporadas de influenza”, afirmó el especialista.
Recomendaciones y medidas de prevención
El Ministerio de Salud reiteró que la vacunación continúa siendo la herramienta más efectiva para prevenir complicaciones, hospitalizaciones y muertes asociadas a la influenza, incluso frente a las variaciones genéticas del virus. Según la cartera sanitaria, la vacuna disponible en Colombia para el año 2025 incluye la cepa A/H3N2, por lo que su aplicación sigue siendo recomendada para la población priorizada.
Hasta el pasado 17 de diciembre, se habían distribuido más de 800.000 dosis de la vacuna en más de 3.000 puntos de vacunación a nivel nacional. Adicionalmente, el Gobierno confirmó que ya está en marcha la adquisición de 5,1 millones de dosis adicionales a través del Fondo Rotatorio de la OPS.
La población objetivo de la campaña de vacunación incluye a niños entre los 6 y 23 meses de edad, mujeres gestantes a partir de la semana 14 de embarazo, personas mayores de 60 años y adultos con enfermedades crónicas como EPOC, diabetes o patologías cardiovasculares. También se prioriza al personal de salud y a los convivientes de menores inmunocomprometidos.
El Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI) recordó que la vacunación se ofrece sin barreras de acceso, independientemente de la nacionalidad o del estatus migratorio de las personas.
Vigilancia epidemiológica y mensaje a la población
Colombia cuenta con un sistema de vigilancia epidemiológica y de laboratorio fortalecido, diseñado para la detección temprana de virus respiratorios y la implementación oportuna de medidas de control. Las autoridades sanitarias insistieron en la importancia de mantener las medidas básicas de autocuidado, como el lavado frecuente de manos, la adecuada ventilación de espacios cerrados y el uso de tapabocas en caso de presentar síntomas respiratorios.
Asimismo, se recomendó el aislamiento domiciliario durante al menos tres días en caso de infección y evitar enviar a niños enfermos a jardines infantiles o instituciones educativas, con el fin de reducir la transmisión.
De acuerdo con la OPS, la efectividad de la vacuna contra la influenza para prevenir hospitalizaciones se sitúa entre el 70 y 75 % en niños, y entre el 30 y 40 % en adultos. En ese contexto, el Ministerio de Salud subrayó que no se han observado cambios en el comportamiento de las infecciones respiratorias ni señales de que el subclado K esté generando un impacto mayor en la salud pública del país.
Finalmente, las autoridades hicieron un llamado a evitar el pánico y a continuar con las estrategias preventivas habituales. “No se trata de un escenario equiparable al de la pandemia de covid-19”, aclaró el Ministerio de Salud en su comunicación oficial.

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