Colombia lidera valorización bursátil a nivel mundial en 2025


El mercado accionario colombiano vive uno de sus capítulos más dinámicos en la última década, impulsado por cifras que lo ubican como líder mundial en valorización durante los primeros siete meses de 2025. Sin embargo, tras el brillo de los resultados, subsisten retos estructurales que amenazan con frenar el impulso logrado.

Según datos de la Bolsa de Valores de Colombia (BVC), el índice Msci Colcap registró un crecimiento acumulado de 28,5% entre enero y julio, posicionándose como el de mayor rendimiento global en ese periodo. Solo en julio, el Colcap avanzó 6,3%, consolidándose como el segundo mejor mercado de América Latina, detrás del Merval argentino. Este comportamiento destacó frente a referencias internacionales: el Shanghai Composite ganó 4,4% y el Nasdaq 4,2%, mientras el Ibovespa brasileño cayó 2,8% y Argentina cerró el periodo con un desplome anual de 8,5%.

Este desempeño, sin embargo, tiene matices. Los analistas coinciden en que la valorización no responde únicamente a un mayor apetito por la renta variable, sino también a factores externos y coyunturales. "El mercado colombiano sigue adoleciendo de una baja oferta de emisores y una limitada diversificación de activos. Estos factores limitan la liquidez y la profundidad necesarias para sostener el dinamismo en el largo plazo", señaló un informe de Aval Casa de Bolsa.

Los volúmenes de negociación respaldan el interés reciente. En julio se transaron $2,84 billones, un 26% más que en junio y 190% por encima del mismo mes de 2024, cifras históricas para la plaza local. Sin embargo, la concentración de emisores sigue siendo un desafío. Actualmente, menos de 70 compañías cotizan en la BVC, muy lejos de mercados vecinos como Chile o Brasil.

El comportamiento de los inversionistas revela, además, una competencia silenciosa entre actores locales y foráneos. El informe de Aval indica que los mayores compradores netos fueron el Sector Real, con $128.000 millones, y las personas naturales, con $81.000 millones. En contraste, las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) y los inversionistas extranjeros redujeron posiciones por $146.000 millones y $81.000 millones, respectivamente. Esta tendencia refleja estrategias divergentes: mientras los locales aprovechan las valorizaciones, los institucionales y extranjeros muestran cautela frente al riesgo país y a las tensiones económicas globales.

En la renta fija también se registraron movimientos relevantes. El ETF Gxtescol, que replica TES en pesos, fue escenario de estrategias opuestas. Las Sociedades Comisionistas de Bolsa aumentaron posiciones por $95.000 millones, mientras que las AFP recortaron $96.000 millones. Estos giros evidencian lecturas distintas sobre el rumbo de las tasas y la política monetaria.

Julio también estuvo marcado por operaciones corporativas que redefinieron el mapa empresarial. Grupo Cibest, holding de Bancolombia, lanzó un programa de readquisición de acciones ordinarias, preferenciales y ADR por hasta $1,35 billones, vigente hasta junio de 2026. Mineros, por su parte, cerró la OPA que permitió a Sun Valley elevar su participación de 57,4% a 65,38% y anunció un plan de recompra por USD 12 millones a dos años. Otro hito fue la escisión entre Grupo Sura y Grupo Argos, que transformó las participaciones cruzadas: los accionistas de Sura recibieron 0,723 acciones de Argos por cada título, y los de Argos 0,236 de Sura.

A nivel individual, Cemargos lideró las valorizaciones en julio con un alza de 19%, seguida de Cibest (6,9%) e ISA (6,2%). En el lado opuesto, Grupo Argos sufrió caídas significativas tras la escisión: -29% en la acción preferencial y -23% en la ordinaria. Canacol también protagonizó descensos, con un retroceso del 21% en julio y un acumulado de -42% en el año.

Pese a estos contrastes, 16 acciones del Colcap ya exhiben valorizaciones de doble dígito en 2025, reflejo del interés de inversionistas que ven oportunidades en medio de la volatilidad global. Cerca de medio millón de accionistas se han beneficiado no solo de la revalorización de sus títulos, sino también de dividendos derivados de buenos resultados corporativos.

El reto para la BVC es claro: sostener el impulso. "El mercado colombiano ha demostrado capacidad para atraer capital y competir a nivel global, pero necesita más emisores, mayor liquidez y profundidad para consolidar su protagonismo", advierte Aval. Con una economía en transición y un entorno internacional desafiante, la clave será transformar el interés coyuntural en una apuesta de largo plazo que consolide a Colombia como un mercado bursátil sólido y diversificado.


Publicar un comentario

0 Comentarios