El operativo, realizado en la ciudad de Quebec, busca recolectar pruebas que confirmen o descarten posibles irregularidades en el manejo del proyecto tecnológico. La SAAQ, responsable de emitir licencias de conducción, administrar pruebas de carretera y gestionar el sistema de seguro sin culpa, ha estado bajo escrutinio desde que el Auditor General reveló los sobrecostos y fallas del sistema en un informe publicado a principios de este año.
Aunque las autoridades no han revelado detalles específicos sobre el allanamiento, la policía anticorrupción indicó que estas acciones forman parte de una investigación en curso para esclarecer responsabilidades. El escándalo ya ha cobrado consecuencias políticas: en febrero, Éric Caire renunció como ministro de Ciberseguridad y Tecnología Digital, en medio de la creciente presión pública.
Analistas han comparado la magnitud del caso con la histórica Comisión Charbonneau, que destapó una red de corrupción en la industria de la construcción. La transformación digital de la SAAQ, que prometía modernizar los servicios públicos, se ha convertido en un símbolo de mala gestión y falta de transparencia.
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